Durante los últimos días de cada año es muy común subir de peso, debido a que las cenas de Navidad y luego de Año Nuevo no siempre le hacen muy bien a nuestro cuerpo. Podemos subir hasta un kilo diario, debido al consumo de grasas saturadas, azúcares en exceso y el consumo de bebidas alcohólicas.
Como es verano y nadie quiere estar con kilos de más, María Paz Rosales, nutricionista de Clínica Bupa Antofagasta, entregó algunos sencillos tips para bajar cuanto antes el sobrepeso adquirido en las cenas y fiestas de fin de año.
“Es muy importante no saltarse las comidas en los horarios fijados, ya que así disminuiremos la ansiedad, aceleraremos el metabolismo y reduciremos el apetito”, expresó la profesional para luego agregar que la hidratación es vital siempre, sobre todo en verano.
“Hidratarse es fundamental y puede realizarse no sólo con agua, sino también con té de hierbas, aguas con limón, infusiones, jugos sin azúcar, jaleas o paletas de helado preparadas con jugos sin azúcar”.
Respecto a las comidas en la tarde-noche, María Paz explica que “en la noche es mucho mejor cenar en vez de tomar ‘once’. Con ello se logrará reducir las calorías y mejorar el peso corporal. También es recomendable acompañar la proteína de la cena con abundantes ensaladas, sobre todo las de hojas verdes y aderezar con condimentos naturales”.
Sobre los tipos de comidas que contienen proteínas, la nutricionista es clara: “prefiera carnes bajas en grasas. Si escoge carnes de vacuno puede ser punta paleta, asiento, abastero, filete o lomo liso. Las carnes blancas son mejor alternativa, tales como pavo sin piel, pescado o pollo”.
Otros tips que entregó la especialista para bajar los kilos de más, es reducir el consumo de sal (retención de líquidos), azúcar (calorías extras) y grasas saturadas, ya que de lo contrario, se estaría corriendo riesgos de eventos cardiovasculares. Además, es muy importante realizar caminatas de al menos media hora todos los días para gastar el ingreso extra de calorías y siempre, procurar dormir lo necesario, ojalá las ocho horas diarias.
Por último, la nutricionista indicó que cada persona debe tomarse el tiempo necesario para desayunar, almorzar o cenar, es decir, no comer apurado ya que aquello también afecta el organismo.
“Comer en menos de 20 minutos no es nada recomendable, es mejor que la persona se tome por lo menos media hora en cada alimentación”, finalizó la nutricionista de Clínica Bupa Antofagasta.