Alzheimer: Cómo entregar el mejor cuidado

Tareas tan simples como recordar el nombre de objetos o familiares, para una persona que sufre de Alzheimer, se pueden transformar en un desafío complejo, ya que esta enfermedad degenerativa afecta la memoria de hechos del presente de una persona, aislándola de su realidad. "Comienzan a desorientarse en lugares que no conocen y los evitan, limitando su actividad social. El paciente se vuelve incapaz de seguir una conversación y dar opiniones sobre lo que acontece", explica el Dr. Carlos Ñancupil, Neurólogo de Clínica Bupa Antofagasta.

Por esto, es que los familiares deben estar atentos a estos síntomas, porque al comienzo del Alzheimer la persona puede darse cuenta de sus fallas, pudiendo sufrir en algunos casos, trastornos del ánimo con aparición de depresión. Si existen antecedentes familiares es importante contárselo a su médico, para que éste lo oriente y si lo requiere, le ayude a tomar las medidas necesarias.

Tratamiento

Para el tratamiento del alzheimer se utilizan medicamentos que, según explica la Dra. Aguirre, sirven para tratar dos factores propios de esta enfermedad:

• Enlentecer la progresión de la enfermedad: En estos pacientes se observa una disminución de una sustancia química en el cerebro llamada acetilcolina. Existen fármacos capaces de inhibir la degradación de ésta, aumentando su disponibilidad.

• Manejar los síntomas conductuales: Algunos síntomas como la agresividad, trastornos del sueño y alucinaciones, pueden ser manejados con antipsicóticos. Otros medicamentos útiles en este contexto son algunos antidepresivos, que tienden a producir un efecto sedante leve, además de inductores del sueño.

¿Cómo cuidar y mantener una buena calidad de vida de un familiar con Alzheimer?

El rol de la familia es esencial para una persona que sufre de Alzheimer, ya que de ellos dependerá su bienestar e interacción con el entorno.

A continuación se entrega una lista de 10 pasos para convivir con el Alzheimer, desde la mirada de un familiar:

1. Si a su familiar o amigo le han diagnosticado esta enfermedad en fase precoz, no dude en solicitar una segunda opinión a un neurólogo o un geriatra, ya que hay que estar seguro.

2. Ayude a su familiar o amigo a hacer su propia agenda diaria. Escriba detalladamente todos los pasos necesarios para poder lograr los pendientes en, como si procediera de otro país y fuera la primera vez en su vida que va a realizar esta gestión. Es bueno que el paciente siga siendo autónomo en la medida de sus posibilidades.

3. Identifique su ropa y coloque su nombre y un número de contacto en un lugar que sea visible, por si se pierde y necesita pedir ayuda.

4. Planifique sus actividades físicas, como acudir a un gimnasio a practicar Taichí o visitando los centros de jubilados para participar en algunas de sus actividades.

5. De la misma manera que cuida su cuerpo, tiene que ejercitar su cerebro. Incluya en su rutina ejercicios de estimulación mental, como, por ejemplo, realización de Sudokus o cualquier activad que le interese.

6. Las zapatillas deben ser de pie completo para evitar caídas.

7. Adaptar el domicilio a las necesidades que el paciente tiene ahora, reduciendo todo lo que se posible, el riesgo de caídas.

8. En el baño, evitar elementos deslizantes e instalar un pasamanos en la ducha y en el WC para poder agarrarse.

9. En las fases más avanzadas, colocar unas pequeñas colchonetas cerca de la cama con el fin de evitar caídas. La cama es la zona con mayor riesgo de caídas.

10. En las últimas fases, valorar un centro residencial.